La casa

pexels-photo-221502

La primera vez que estuve en aquella casa tuve una sensación escalofriante. Estaba inspeccionando el sótano de mi nueva mansión, cuando toqué un botón extraño escondido bajo el escritorio. De repente una entrada secreta se abrió ante mí, la que me llevó donde estoy ahora.
La primera habitación era toda roja, y además solo contenía tres puertas.
Accedí a una de ellas, que me llevó a otra habitación llena de libros.
Fui viajando de sala a sala, todas eran iguales: Llenas de historias y puertas.
Como estaba muy cansado me puse a leer algunos de aquellos libros.
Estuve horas leyendo, hasta que me entró el sueño.
Cuando me desperté me encontraba en el mismo sitio, pero había una diferencia: No había puertas. Me puse histérico, chillé pidiendo auxilio todo lo que pude, pero nadie atendió a mis palabras.
Al final quedé exhausto, necesitaba descansar, así que de nuevo tomé un libro. Abrí la primera página y empecé a leer.
Trataba de un señor que, al descubrir una especie de biblioteca en el sótano de su nueva mansión, decide entrar. En ella se encuentra con habitaciones llenas de puertas y con miles de libros. Se pone a leer uno, pero al final se duerme. Cuando se despierta, se encuentra atrapado: la sala ya no tiene puertas. Después de horas pidiendo ayuda, queda destrozado, así que vuelve a coger otro libro.
Tenía pinta de ser buen libro, pero ya me encontraba demasiado cansado para continuar leyendo. Así que volví a dejarlo en la humilde y vieja mesita de mi cuarto, para seguidamente ponerme a dormir.

0 replies

Leave a Reply

Want to join the discussion?
Feel free to contribute!

Deixa un comentari

L'adreça electrònica no es publicarà. Els camps necessaris estan marcats amb *