Quince años

Hará unos quince años mis padres me compraron unas botas negras y relucientes. Iba a todos lados con ellas puestas, hiciera frío o calor. Se volvieron mis botas favoritas, hasta les puse nombre: eran la bonita pareja de Julieta y Romeo, quizá me gustaba demasiado Shakespeare. Pasamos unos cortos e intensos dos años llenos de aventuras por el bosque, escalando montañas o hasta tranquilos paseos por la playa. Un día mi madre me compró unas botas nuevas porque decía que Romeo y Julieta ya me iban pequeñas. Eso no era verdad. Además, no podía haber botas mejores.

Después de eso me pasé años buscándolas sin parar y hoy, quince años después, las he encontrado en un armario escondido que tenemos en casa. Romeo está un poco rota y Julieta está sucia pero tan preciosa como siempre. Echo a llorar, cómo las había echado de menos.

[Text inspirat en el quadre de Van Gogh]

Judit Johnson